El próximo miércoles, 2 de junio, a las 11:15h, junto al edificio de Telefónica situado en la calle de Gran Vía, un grupo de trabajadores de las diferentes empresas del Grupo Telefónica, así como de las empresas subcontratadas que sufren la precarización en este sector tras la privatización de Telefónica, realizarán un llamativo acto, lleno de colorido, donde se representará la desinfección del “virus avaricia Telefónica”.
Se acerca al área de descontaminación del VAT-1 (Virus Avaricia Telefónica). La mayor empresa de comunicaciones del país está siendo descontaminada de un virus que ha destruido por completo el empleo
de calidad -40.000 puestos de trabajo en tan solo 15 años- generando, como efecto secundario, la más absoluta de las precariedades laborales: cientos de miles de puestos de trabajo basura en las áreas del telemarketing, de
los servicios técnicos e informáticos de la telefonía...
El virus provoca una fuerte frustración personal, acompañada de malestar económico general: impide la independencia económica de nuestras y nuestros jóvenes y la penuria en los ya independizados. La
precarización también es responsable del aumento de la accidentalidad laboral y la depresión, con la consiguiente repercusión en los gastos de la seguridad social. Debido a su alta capacidad de mutación -ahora ha adquirido la apariencia de VAM-2 (Virus Avaricia Movistar)- y su gran virulencia, infecta a miles de personas a pesar de las medidas de protección: excelente preparación académica.
Mutado del primigenio virus COMPAÑÍA TELEFÓNICA NACIONAL DE ESPAÑA (CTNE-0) gracias al proceso privatizador de los gobiernos socialistas y populares; ha adquirido su máxima capacidad infecciosa durante estos años de dura crisis económica al no ser capaz de compartir con la sociedad sus estratosféricos beneficios; que no ha sido capaz de “arrimar el hombro” y crear empleo de calidad para nuestras familias.
Mañana se preve la máxima concentración de virus durante la Junta de Accionistas que se celebrará en los
recintos feriales de la casa de campo. Hoy, la Confederación General del Trabajo (CGT) pretende desinfectar su sede mas emblemática: este edificio de la Gran Vía, que simboliza, como ninguno, el poder de infección de una compañía que desde que se privatizó ha contagiado de precariedad a cientos de miles de personas.
¡Aún estamos a tiempo!