Expansion - El Ayuntamiento de Barcelona anunció ayer que, "ante los incumplimientos contractuales de la adjudicataria de la consulta de la Diagonal, se abrirá un expediente administrativo a Indra para depurar responsabilidades, determinar sanciones y exigir daños y perjuicios".
Por ello, el consistorio ha decidido suspender cautelarmente el pago a la compañía por los servicios prestados.
El Ayuntamiento de Barcelona adjudicó a Indra la gestión informática del voto por 450.000 euros. A su vez, la compañía subcontrató a Scytl para que aportara el programa de votación.
El fracaso de la consulta, que concluyó con una negativa a reformar la Diagonal por parte del 80% de los 172.161 votantes tras diversos incidentes informáticos, precipitó la dimisión del primer teniente de alcalde, Carles Martí, y de la gerente de informática, Pilar Conesa. Las responsabilidades por los fallos técnicos durante la votación rápidamente apuntaron a Indra (ver EXPANSIÓN Catalunya del 18 de mayo).
Indra indicó ayer que “analizará el expediente informativo y dará una respuesta por los cauces que legalmente correspondan”. La compañía advirtió de que “tiene por norma no hacer manifestaciones sobre posibles diferencias con sus clientes, máxime cuando incluyen cláusulas de confidencialidad”.
Austeridad
Por otro lado, el Ayuntamiento aprobó ayer la aplicación de un plan de austeridad a través de la reducción del gasto público no productivo, que incluye la publicidad, el consumo de luz y el material de oficina.