Hoy el secretario de Salud Laboral de la CGT de Catalunya, Alex Tistminetzky, se reúne con Antoni Comín, conseller de Salut de la Generalitat de Catalunya, para tratar diversos temas. Entre ellos, a petición de la Coordinadora de Informática de la CGT, el reconocimiento como enfermedad laboral del síndrome de túnel carpiano para los y las informáticas o personal que trabaje con ordenadores. Aquí tenéis el comunicado.
¿Qué es el síndrome de túnel carpiano?
Es una inflamación de tendones o ligamentos de la mano que derivan desde un fuerte dolor a daños crónicos irrecuperables. Quien más quien menos muchos de nosotros lo hemos sufrido alguna vez al trabajar con ordenadores. La única solución es la baja inmediata para que no vaya a peor.
¿Por qué pedimos que se reconozca como enfermedad laboral?
Cuando en la baja médica se indica que la enfermedad proviene del trabajo laboral, el pago de la cantidad por baja o discapacidad (total o parcial) posterior es mayor. Esto es muy importante si, por culpa de esta lesión, no podemos seguir haciendo nuestro trabajo.
Actualmente hay un cuadro de enfermedades y puestos de trabajo que hacen que esta categorización como 'baja laboral' sea automática. Desgraciadamente, este cuadro es vintage y no hay voluntad política de actualización a nuevas profesiones, básicamente para ahorrar dinero. A los y las trabajadoras afectadas, que les den.
La vía judicial ha cambiado
Ahora bien, hay una consideración amplia que va más allá del cuadro fijo. La jurisprudencia y denuncia de trabajadoras ha permitido abrir brecha, como por ejemplo hace poco en el TSJC. Pero mútuas y organismos públicos no sólo no facilitan la extensión de esta realidad legal, sino que la obstaculizan para que sólo quien denuncie pueda obtenerla.
¿Qué pedimos?
El conseller de Salut no tiene competencias para añadir este síndrome como enfermedad profesional. Ahora bien, sí tiene competencias para emitir instrucciones médicas y legales sobre los organismos públicos, tribunales médicos y mútuas para que se respeten los derechos de las trabajadoras sin tener que pasar un vía crucis de juzgados.
Y eso es lo que reivindicamos y trasladamos. Esperamos ver una mínima sensibilidad social que el anterior ocupante en su lugar, el depredador del sector público sanitario Boi Ruiz, no tenía.
Nuestra intención es extender estos reconocimientos a otros territorios.