La plantilla de Unipost está librando una Huelga Indefinida ejemplar desde el pasado 20 de Diciembre, convocada en solitario por CGT después que la plantilla rechazara un preacuerdo de despidos y rebaja salarial alcanzado entre la empresa y CCOO, UGT, USO.
Millones de paquetes sin atender, bloqueada la correspondencia de La Caixa, Endesa y grandes clientes. Los y las trabajadoras están presionando con mucha fuerza y determinación, pero necesitan algo impresicindible: Nuestra solidaridad, tu solidaridad.
Aporta los euros que puedas a la siguiente caja de resistencia: 2100-0880-31-0200305927. Os adjuntamos texto de la sección sindical de la CGT en Unipost.
UNIPOST HUNDE A SUS TRABAJADORES (artículo de CGT Unipost 5-1-2013)
La Empresa Unipost de correo privado con oficinas por todo el estado lleva desde hace cuatro años una cruzada contra sus 2600 trabajadores, precarizando sus sueldos y sus derechos laborales y económicos.
Las trabajadoras y trabajadores de Unipost hemos perdido el miedo, hemos dicho BASTA a esta repugnante sangría que está llevando a cientos y cientos de familias a la desesperación. Hemos dicho SE HA ACABADO y hoy cientos de trabajadores estamos de HUELGA INDEFINIDA desde el dia 20 de Diciembre.
En Barcelona está todo parado , millones de cartas retenidas, certificados de la Diputación de Barcelona y otros organismos oficiales retenidos. No solamente el caos es total en Madrid y Zaragoza, la correspondencia también se amontona en los pasillos y en alguna otra ciudad más de lo mismo.
Esta huelga ha sido convocada en solitario por la Cgt ya que los otros sindicatos ccoo y ugt despues de hacer un referéndum con una única pregunta de la Empresa donde había que decidir si los trabajadores queríian más recortes salariales y 435 despidos, los trajadores dijeron que NO y a estos sindicatos mas propicios a firmar con un SI les salió el tiro por la culata.
Estamos en una huelga indefinida, sabemos que estamos haciendo daño aunque la Empresa no lo reconozca y seguiremos hasta que la Empresa no dé marcha atras en su hipocresia de que seamos las y los trabajadores quienes paguemos si crisis.